martes, 27 de diciembre de 2011

La oscuridad



El sol se apagó.
La mugre llueve desde las torres altas. Los buitres, atentos a una cena triunfal, esperan.
Sobre esta imitación de ciudad se levanta la suciedad formando nubes oscuras que vuelve más densa la noche. De pronto un relámpago ilumina la marea de seres que se arrastran con ojos desorbitados sobre las calles amargas, y con muecas dementes y la baba chorreando, se arrojan sobre los pocos animales que quedan para devorarlos.
No es un festín; es una comida rápida de carne cruda y sangre.
Algunas llamas encienden el cielo y las torres arden.
Ya se ven las sobras del almuerzo improvisado: huesos, cuero y pellejos sanguinolentos.
Se ha engordado al ganado.
Un ser extraño, que podría ser  un payaso y no lo es, se eleva ante la multitud satisfecha. El ser abre la boca, y los seres que se arrastraban con los ojos desorbitados comienzan a reír. Ríen y ríen a carcajadas. No pueden parar, se revuelcan de la risa. Se cagan y se mean; se revuelcan en su inmundicia. Se ahogan, no pueden parar, y así van muriendo ahogados en sus propias carcajadas.
Miles de cadáveres yacen tirados con las mandíbulas desencajadas. 
Los buitres se lanzan hambrientos y se dan un verdadero festín.

miércoles, 21 de diciembre de 2011

Hacedor...


Hacía 

No desarrollaba, no se involucraba

Sólo hacía
El tiempo no cuenta, ni el aroma, ni el lucro
El espejo se empaña, los ayeres añoran
Y la semejanza inunda.

Dueño de la nada
Él hacía

A la noche volvió a la casa
Y se acostó
En el sueño (enfundado en sus sabanas)
Siguió haciendo
Gran constructor
soñaba
Con alas inmensas y un par de tenazas,
Herramientas encastradas en su cuerpo
Todas para hacer

Despertador y otro día
Cadencia del sueño roto
Desayuno y vuelta a marchar
De ocho, diez, doce horas
De hacer, hacer y hacer

Hasta la vuelta a la casa
Y el refugio en el colchón
Donde el reloj gira y se repiten las acciones

Un cuarto para las doce
Doce y cuarto, tres quintos después
De las seis

Y cada mañana desearía morir
Solo por  un instante le vuelve el alma
Y en ese segundo de certeza,
En ese segundo de impresión
La realidad rompe con la realidad
Y él se da cuenta que desearía
Morir
Morir para parar la maquina
Para decir basta y...

Hacer, son las 7 y cuarto
Y se le hace tarde para
Hacer                      y
                                                               nada más

jueves, 15 de diciembre de 2011

La última vez


Se atraviesa con saña
Con locura de cuerpo inflamado
La mentira se despierta y en el sueño se desmorona el amor
Los gatos cantan en la noche. Ahí una mentira
La belleza esta tranquila por las tardes. Y otra más

Pero no importa

No cuadran las palabras en un mundo desesperado
Porque son como gritos y lamentos
Nada más

Y aquí vienen los sonidos: un ulular de una bocina afónica
                           Un correr con las zapatillas en la mano
                           Un vozarrón que  dice algo
                           Una explosión en los oídos
                           Un rojo aún caliente que termina en el cordón de la vereda

                           Una mirada de adiós que resuena como la tormenta.

viernes, 9 de diciembre de 2011

Par



Te veo como si descendieras
En un instante todo será diferente
Distinto
Como si escapases  hacia algún lugar
                                                   cercano

No me veas así
somos dos mundos separados
Incapaces los dos desiertos

Escapar eso sí
Como caracoles asustados
O como tormenta
O como en los sueños cuando corres y no llegas

Somos dos partes distantes
Extrañas
las dos desamparadas

Pero con ganas de todo
Otra vez
                y otra

Como queriendo más cuando no hay
O como esperando a que llegue
O como la ultima vez

Somos dos tontos

Eso sí.

lunes, 5 de diciembre de 2011

El charco


 La lluvia enciende
                                  Y quema
Llueven brazas rojas, intensas
Como el corazón abandonado

Los charcos arden
El piso vibra con cada gota que cae la tierra se seca

Yo observo

 me llevo las manos al pecho                             no puedo respirar     
                                                                                                                                          Llueve