lunes, 31 de octubre de 2011

Mientras que...



Los bichos inmensos rodean al hombre desierto. Una vez más la venganza de la vida. El olor a muerte seca y a sangre coagulada por todos lados. Corran y griten inútiles nada la detendrá.
Es de día y es de noche. Las dudas no entran. Corran inútiles que se acerca la agonía en busca de una víctima más.
Duras las penas. Duro el brazo fuerte que con sus dedos largos desgarra las vísceras de los que duermen en el suelo pelado de la calle.

lunes, 24 de octubre de 2011

Otros niños



No tiene sentido
Corren los niños con las melenas como serpientes y los dientes afilados y brillantes
                                                                                                                      Sonríen
Yo los miro

No tiene sentido
Que me quede acá parado esperando a que lleguen y me despedacen
                    Como la otra vez

¿ por que no corro a ocultarme en alguna cama ?

los niños sonríen
                                                  me congelan la sangre

es un día sereno
un poco gris pero tranquilo
esos días en los que no pasa nada            pero sí




ya se acercan

no tiene sentido que siga acá como si nada
                                                                       y sin embargo

ya me ahoga la melena
              ya se me meten en la boca hasta la garganta
                                             hasta el estomago
                                        y revientan desde adentro
                                                                                  regando el piso con cascabeles
                                                                                                 rojos
                                                                                                       de color.

martes, 18 de octubre de 2011

Lo ignoraba



                                               ¡Solo por fin! Ya no se oye más que el rodar de
                                                   algunos coches rezagados y derrengados. Por unas
                                                   horas hemos de poseer el silencio, si no el reposo,
                                                  ¡por fin desapareció la tiranía del rostro humano, y
                                                   ya sólo por mí sufriré!
                                                                            (Baudelaire)


Añoraba lo posible
lo que sucede o sucede
No sabía
frecuentaba incontables noches de relieve
un porvenir en el instante
que no me pedía nada
Era yo y el momento
pero aun así
estaba la búsqueda
de quebrar con el tiempo que se había detenido
La riqueza de sensaciones que se plasmaban en cada palabra
un hogar lleno de leña ardiendo desde adentro
y afuera:
el río tibio y la tormenta helada
en constante manoseo carnal
Bebía con las entrañas
me mareaba de locuacidad escrita
volaba el papel
Las hojas eran aves profanas
una herencia cautiva rompiendo la jaula maldita
lanzándose a ajustar cuentas con la poesía

Era hermoso

Yo ignoraba el tumulto
el enjambre repleto
la azarosa llegada de cientos
que atestan la mirada

Una puerta se abría
y era para salir a dar un paseo

en cambio

el portón deja entrar las multitudes
que enajenan el instante de la creación
y preguntan
Preguntan

Devestirme en la casi oscuridad
y en la poca luz
sufrir y alegrarme
Pero solo

Añoraba lo que fluye de la voluptuosidad
sin darme cuenta que no se encontraba aquí:
entre cientos
miles, millones y millones
de preguntas y respuestas
idas y venidas
miembros, torsos, caras y voces
que destruyen mi solitaria realidad.

sábado, 15 de octubre de 2011

Noctilucas

Las luces luciernagean en la oscuridad descompuesta
Quien apaga la luz desmiente lo contrario
Una bacanal acaba con las estructuras humanas
Todos dicen:
Que nadie encienda la luz, porque de hacerlo, finalizara con la fiesta
Una gran emoción les corre por dentro
Escucha
Escucha el sonido de las flores con las que pelean los festivos personajes de esta prosa luciernetica
Escucha como chocan
Mira como se sacan chispas las flores
Las chispas son las luciérnagas
Que nadie calle
Que las voces le roben espacio al silencio. Que el silencio, hoy, no se apodere de la fiesta
En la oscuridad las luces que no cesan
Un beso vuela por el aire; hay alguien que intenta arrebatárselo al ausente. Lo logra y se lo pone en la boca
Una mano acaricia otra piel; es suave. Tiene el aroma de las chispas, que son las flores, que son las luciérnagas, que brillan en la oscuridad
Sonido de pies descalzos. Alguien corre en busca de su amante  perdido entre tanto amor desnudo
La belleza del instante es infinita y única
Todos cantan sus sueños. Nadie se rinde ante el dolor porque es como una gran mentira que atraviesa las almas. Si lo escucharan, arruinaría la fiesta
Por eso todos bailan y gritan y ríen y cantan
Todos, todas y las luciérnagas
Que nadie encienda la luz.

jueves, 13 de octubre de 2011

Devenir



Vergüenza de buscarme
de devenir en ese otro que se esconde
de consolarme pintando amarguras
mientras mis manos se quiebran

Tomar prestadas palabras solitarias
para jugar a ser libre
para convencer al tiempo
que se equivoca

Elegir sabanas ásperas
para que lijen mi piel
en la oscuridad
Para que multipliquen espectros
En la noche

Sonreír tranquilo hasta el final
Yacer tranquilo hasta el final
Gritar en silencio hasta el final.